OTTORINO STORTI, EL AMOR POR LOS RETOS Y LA INNOVACIÓN

Era el año 1956…

La historia de Storti comienza en enero de 1956 en Belfiore, en la provincia de Verona. A partir de ese momento, gracias sobre todo al ingenio de su fundador, Ottorino, Storti inicia un crecimiento imparable que la ha llevado a convertirse en un referente mundial en el campo de la mecanización agrícola. La innovación siempre ha sido uno de los puntos fuertes de Storti.
Ottorino Storti.

Ottorino Storti el genio.

Durante los turbulentos años cuarenta, Ottorino Storti obtiene su diploma de técnico-mecánico y termina trabajando para los alemanes durante más de siete meses. Después de la guerra, vuelve con su familia en Montagnana (PD), para trabajar en la granja de su padre. En este contexto, sus brillantes intuiciones creativas comienzan a manifestarse, llevándolo a motorizar todo lo que es operado a mano en la granja, mejorando el rendimiento de tractores y maquinaria agrícola. Con esta experiencia, en 1950 inicia una actividad artesanal como contratista. A finales del verano de 1955, su primo, Giovanni Frigo, le propone alquilar un taller en Belfiore (VR), donde nacerá, en enero de 1956, la empresa Ottorino Storti. Los primeros trabajos se centran en la reparación de maquinaria agrícola y en la gestión de una bomba de combustible «Aquila», que se encuentra en el taller. Más tarde, Ottorino, como la zona es rica en huertos, decide producir una serie de carros cisterna personalizados para tratamientos antiparasitarios. En mayo, se ve afectado por una enfermedad muy grave, que durará hasta finales de 1956. Durante los largos meses de enfermedad, sin embargo, el taller de Belfiore no cierra, porque su primo, Giovanni Frigo —quien no quiere cancelar el sueño de Ottorino—, se ocupa personalmente de la fábrica. Después de una crisis a principios de los años sesenta, el negocio se reanuda. En 1966 Ottorino abandona a antigua empresa alquilada para construir una planta nueva en Belfiore. Sin embargo, a pesar de sus continuos esfuerzos, Ottorino no ve un resultado económico rentable. El mercado de maquinaria para el tratamientos antiparasitarios en la fruticultura está saturado. Ottorino, en realidad, por carácter es más un inventor que un comerciante, para salir de esta situación de estancamiento comienza a analizar el campo de la zootecnia. En aquella época, varias explotaciones ganaderas tienen que hacer frente a la necesidad de extraer el ensilado de maíz —el llamado «ceroso»— de los silos de trinchera, utilizado durante todo el año para alimentar a los bovinos de engorde. Estamos en 1967 y Ottorino Storti, en poco tiempo, construye el prototipo de una máquina que extrae el ensilado de maíz sin esfuerzo, dejando una superficie perfectamente vertical, lisa, compacta y por lo tanto favorable para la mejor conservación del producto. Dados los buenos resultados obtenidos, patenta el invento en la Cámara de Comercio de Verona y luego en todos los países europeos. Además, al no existir una categoría de productos en la que clasificar este tipo de máquinas, Ottorino Storti también inventa el nombre: «desensilador PLUTO». La innovadora máquina es recibida con gran interés por criadores y comerciantes, hasta el punto que la importante empresa «Mengele & Steiner» de Bolzano decide iniciar una relación comercial bastante intensa con Ottorino Storti. En 1968, se introduce una nueva máquina: el carro mezclador MASTINO para forraje de hierba, que destaca —en comparación con los primeros carros de mezcla americanos— por la funcionalidad de un nuevo contenedor, un nuevo eje de mezcla y una nueva transmisión. «La idea de estos carros mezcladores era americana» —dice Ottorino en una entrevista reciente— Los pocos agricultores italianos que los habían utilizado, sin embargo, no estaban contentos porque no funcionaban bien y los habían dejado de lado como una compra equivocada. Intenté, entonces, estudiar el caso en profundidad, logré entender sus defectos, mejorar sus características diseñando un nuevo contenedor, un nuevo eje mezclador y una nueva transmisión. La unión del desensilador PLUTO y el carro mezclador MASTINO se convierte inmediatamente en una combinación ganadora: un solo operario en poco tiempo (30-40 minutos) es capaz de alimentar a un número considerable de cabezas de ganado. Para dar una idea de la utilidad de estas dos máquinas, piense que hasta entonces, para alimentar el mismo número de ganado se necesitaba al menos media jornada de trabajo de tres o cuatro personas. El éxito es inmediato y las ventas crecen constantemente, marcando el comienzo de una tendencia que nunca se detendrá. Dado el éxito de estas máquinas, Ottorino Storti abandona definitivamente la construcción de carros cisterna para tratamientos antiparasitarios y se dedica totalmente a la nueva producción de máquinas para la ganadería. Pronto se recibieron también los premios oficiales: durante la Feria Agrícola de Verona de 1973, el desensilador PLUTO fue galardonado con una medalla de oro como la mejor innovación técnica.

Crecer, crecer, crecer

Para contrastar con la técnica las imitaciones de algunos competidores desleales, pero, sobre todo, para satisfacer las necesidades de los ganaderos, Ottorino produce nuevas patentes que todavía revolucionan el sistema de la mecanización de la alimentación zootécnica. En 1974, de hecho, nace la DESSILCAR, la primera máquina del mundo capaz de realizar tres operaciones: desensilar, mezclar y distribuir los alimentos al ganado. Se trata de un nuevo salto cualitativo: un solo operador, con la ayuda de un solo tractor y el Dessilcar de 4 metros cúbicos, es capaz de alimentar en muy poco tiempo (unos quince minutos) hasta 100 cabezas de ganado, con una reducción significativa del esfuerzo y de los costes de gestión. Posteriormente se produce la máquina combinada COCKER (desensilador-mezclador-distribuidor) de 1 metro cúbico. – y el BRACCO de 3 metros cúbicos. Para poder hacer frente a los numerosos pedidos de este tipo de máquinas, Ottorino Storti y su hermano, Antonio, fundan en 1975 una nueva empresa: FRASTO (Fratelli Storti) S.a.s., con sede en el pueblo de Albaredo d’Adige (VR), que producirá máquinas para las granjas pequeñas. STORTI, por su parte, se especializa en la construcción de máquinas para explotaciones ganaderas medianas y grandes. Tras la apertura de un nuevo e importante mercado, Inglaterra, donde los agricultores añaden grandes cantidades de heno largo al ensilado de maíz picado, Ottorino Storti diseña y patenta en 1979 un nuevo sinfín de corte y mezcla con cuchillas asimétricas, que se denominará «sinfín Unifeed». Esta invención, todavía hoy objeto de imitaciones, será la base del futuro éxito de Storti en la construcción de sus carros mezcladores. En los primeros meses de 1982, la ruptura de la relación comercial con Mengele & Steiner lleva a Ottorino Storti a preparar un nuevo plan de comercialización, una nueva lista de máquinas y una nueva red de ventas. No contento con todo esto, también diseña nuevas máquinas, lanzando al mercado los primeros carros mezcladores-desensiladores autopropulsados: IDROALANO e IDROMASTINO. En estos años, la empresa emprende el camino de la distribución por su cuenta de la gama, incluso a escala internacional, comenzando por Francia e Inglaterra y continuando con Alemania. Mientras tanto, en FRASTO, Paolo —uno de los hijos de Ottorino— muestra, a temprana edad, un espíritu inventivo digno de su padre, con el que desarrolla una nueva máquina destinada a revolucionar aún más el sector de los carros desensiladores mezcladores: el BOXER Unifeed. En la base del proyecto hay un innovador sistema de alimentación para vacas lecheras llamado Unifeed, que está ganando terreno por sus ventajas objetivas. En esencia, el Unifeed consiste en la suministración simultánea de todos los elementos de la ración: el ensilado de maíz —el alimento básico— se complementa con los demás componentes de la dieta (ensilado de hierba, heno, harinas, etc.) debidamente mezclados por un carro picador-mezclador adecuado. Desde el punto de vista técnico-económico, las ventajas que se pueden obtener del uso correcto de esta técnica pueden resumirse brevemente de la siguiente manera: aumento de la ingesta de materia seca y mejor aprovechamiento de los alimentos; mejora de la producción de leche tanto en cantidad como en calidad; mejora del estado higiénico-sanitario de las vacas; uso más eficiente de los subproductos de la granja

LEA LA INTERVISTA A OTTORINO STORTI

 

Máquinas que han hecho la historia de Storti y de la zootecnia mundial

  • MASTINO (1968), el primer carro mezclador de arrastre y autopropulsado
  • DESSILCAR (1974), la primera máquina del mundo capaz de desensilar, mezclar y distribuir alimentos al ganado
  • COCLEA UNIFEED (1979), primer sistema de mezcla Storti patentado
  • BOXER (1983), el primer carro combinado del mundo equipado con una fresa desensiladora universal y autocargadora
  • QUADRIFOGLIO (1989), primer carro vertical Storti
  • IDROBOXER (1992), el primer carro autopropulsado con sistema de desensilamiento frontal
  • OV (1994), el primer carro con el revolucionario sistema de mezcla patentado que combina dos sinfines horizontales con uno vertica
  • LABRADOR (1999), primer carro con el sistema de corte y mezcla Multiflow
  • GREYHOUND (2004), el primer autopropulsado del mundo suspensiones automovilísticas McPherson
  • DUNKER T1-T2-T3 (2016) nueva familia de vehículos de arrastre verticales
  • HUSKY (2008), primer carro con el sistema de mezcla patentado Fast-Cut Multiflow
  • DOBERMANN (2009), autopropulsado vertical de alto rendimiento con grandes volúmenes
  • DOBERMANN EVO (2012) evolución de la gama alta
  • TERRIER POINTER EVO (2014) familia de autopropulsados entry level verticales y horizontales

 

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